El jardín de los cerezos (1903) fue la ultima pieza que escribió Anión Chéjov y es, quizá la más famosa de todas sus obras de teatro. En ella, el autor vuelve a un tema casi omnipresente en sus creaciones: la lenta y prolongada agonía de la Rusia aristocrática y noble del siglo XIX. El oso y La boda son dos breves tragicomedias que corresponden al periodo en que Chéjov incursionó en
el vodevil.