Ante un público muy bien dispuesto, se estrenó el 29 de septiembre de 1942 en la Comedia, el drama cómico -así se indicó en los carteles- Los habitantes de la casa deshabitada, del conocido humorista Jardiel Poncela, que, pugnando por ser original y tratando de dar nuevos cauces a su concepto de la comicidad y de la ironía ofrece en esta producción un argumento esquemáticamente dramático, que al pasar por el tamiz de su humorismo, se descoyunta y se deforma, entrando los caracteres, la misma acción y el diálogo, en el terreno de la franca comicidad perseguida por el autor. Trátase, en Los habitantes de la casa deshabitada, de ridiculizar esa sensación de angustia que denominamos miedo, y Jardiel Poncela desenvuelve su plan con innegable habilidad y abundancia de ingenio; pero probablemente falta en su obra esa sensación de espontaneidad, que en el teatro suele ser un factor de primera fuerza. El público no estuvo parco en sus aplausos al autor ni los regateó tampoco a los actores, de los que es justo destacar a José Orjas, que estuvo admirable de gracia y naturalidad.
(Antonio J. Mezieres)